Cirugía de Mínima Invasión: avances y beneficios
La recuperación de los pacientes sometidos a una Cirugía de Mínima Invasión es notablemente más rápida, con menos complicaciones
La Cirugía de Mínima Invasión, en la teoría, consiste en utilizar instrumentos, ya sea de visión directa, visión a través de fibra óptica o algún tipo de instrumento con cámaras, que nos haga realizar una cirugía sin realizar una herida de diez, quince o veinte centímetros. Este enfoque se puede aplicar en diferentes compartimentos del cuerpo.
La revolución de la Laparoscopía
En los últimos cinco años, la revolución en los aparatos de Laparoscopía ha sido evidente en todas las ramas de la cirugía, desde la Cirugía Oncológica y Urológica, hasta la Cirugía Ginecológica y de la Glándula Tiroidea o Mamaria. Sin lugar a dudas, la Cirugía de Mínima Invasión requiere de aparatos e instrumentos especiales para llevar a cabo los procedimientos.
Aunque inicialmente se utilizaban principalmente para las cirugías más básicas, como la vesícula y el apéndice, actualmente se realizan procedimientos más complejos, como las resecciones de colon, recto, estómago, páncreas e hígado, a través de la Laparoscopía.
¿Qué beneficios ofrece?
La recuperación de los pacientes sometidos a una Cirugía de Mínima Invasión es notablemente más rápida, con menos complicaciones. En el ámbito de la Oncología Quirúrgica, por ejemplo, la Histerectomía por Laparoscopía, que implica la extirpación de la matriz de la región pélvica utilizando instrumentos laparoscópicos, deja solo tres pequeñas cicatrices de cinco milímetros en el abdomen.
Esto permite una recuperación mucho más rápida para las pacientes, otros procedimientos comunes realizados mediante Laparoscopía incluyen las Resecciones Colónicas e Intestinales, Biopsias y Septectomías Pulmonares.
Diferencias entre Cirugía Tradicional y la Laparoscopía
Realizar una Cirugía Tradicional con hilo, tijera y bisturí es muy diferente a realizarla utilizando los aparatos de Laparoscopía. La Laparoscopía requiere de habilidad y entrenamiento, así como un completo conocimiento de la anatomía de la cirugía abierta para poder resolver cualquier problema que surja durante el procedimiento.
Además, es necesario dominar la tecnología en constante evolución, en términos de energía para el corte, instrumentos y suturas nuevas, e incluso engrapadoras para cortar órganos y tejidos.