Dedo de Gatillo ¿Qué es y cómo tratarlo?

Dedo de Gatillo ¿Qué es y cómo tratarlo?

Editado por: el 10/10/2023

En los últimos días ¿Has notado con alguno de tus dedos ha comenzado a curvearse hacia la palma de tu mano? Podría tratarse de uno de los padecimientos que va en aumento en la actualidad. El dedo de gatillo, ¿Qué es y cómo tratarlo? ¡Aquí te lo contamos!

 

¿Qué es?

 

Conocido coloquialmente como dedo de gatillo o en resorte es una afección también llamada por los Especialistas de la Mano como Tenosinovitis de los Flexores y que se caracteriza por la incapacidad de extender el dedo una vez que ha sido flexionado y produce una sensación de bloqueo, similar a cuando jalamos de un gatillo, de ahí su nombre.

 

Lo que sucedes es que nuestro tendón pasa por en medio de unos túneles llamados poleas, que al inflamarse los tendones se impide su movimiento a través de la polea y se origina la sensación de bloqueo. Existen 4 grados de inflamación, del uno al cuatro donde el primer grado es cuando solo se siente dolor en la base del dedo, pero aún se puede enderezar y mientras más aumenta la inflamación, menos la posibilidad de liberarlo, así como en el grado 4 donde se encuentra completamente bloqueado.

 

Causas y síntomas

 

No existe una causa única para este padecimiento, sin embargo, algunos estudios han revelado que una de las posibles causas son las actividades que requieren agarres repetitivos, así mismo personas con Gota, Diabetes o Artritis Reumatoide. Es más común en mujeres que en hombres.

 

El dedo de gatillo puede ser detectado por la molestia que ocasiona desde la base del dedo y su unión con la palma y que al momento de presionarla provoca dolor, también puede haber la presencia de nódulos. Así mismo cuando el padecimiento comienza a agravarse de tal manera que comienza a flexionarse hacia la palma, causando molestia y dolor para enderezarlo quedando bloqueado en esa posición.

 

Tratamiento

 

Para un tratamiento adecuado en necesario acudir con un especialista en Cirugía de Mano en donde se evaluará el grado en el que se encuentra, tomando en cuenta las zonas de dolor, la fluidez del movimiento y el tipo de bloqueo, con ello determinará un tratamiento a base medicamentos que reduzcan la inflamación y terapia física para recuperar el movimiento. Cuando no se logra con estos medios puede ser necesario recurrir a la cirugía, la cual es mínimamente invasiva, indolora y con una rápida recuperación.

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