Hiperplasia Prostática Benigna (HPB): ¿En qué consiste el tratamiento?
¿Qué es y cuáles son los síntomas?
El concepto clásico de Hiperplasia Prostática Benigna (HPB) se refiere a los síntomas de obstrucción e irritación causados por el crecimiento de la glándula prostática, éstos, a su vez, se denominan como:
- Síntomas de vaciado: dificultad inicial, goteo tras el espacio, interrupciones, esfuerzo
- Síntomas de llenado: baja frecuencia de flujo, nicturia, Incontinencia Urinaria e incontinencia de esfuerzo
- Síntomas posteriores al espacio: regate final y vaciado incompleto
Todos estos, en conjunto, se consideran signos del Tracto Urinario Inferior (STUI): diversos estudios indican que la prevalencia de STUI es del 16,6% en hombres mayores de 50 años, mientras que en hombres mayores de 70 años la prevalencia es 3 veces mayor.
¿En qué consiste el tratamiento?
Los objetivos del tratamiento son:
- Mejorar los síntomas y la calidad de vida
- Prevenir la progresión de la enfermedad clínica
- Reducir el riesgo de complicaciones y/o la necesidad de cirugía
¿Cuándo es necesaria la cirugía?
El tratamiento quirúrgico es una opción utilizada para pacientes sintomáticos de moderados a graves que han desarrollado complicaciones como:
- Retención urinaria recurrente
- Infecciones Urinarias frecuentes
- Repetición de hematuria
- Fracaso del tratamiento
- Divertículo vesical grande
- Recuento urinario
- Obstrucción del tracto de eyección
No obstante, algunos pacientes prefieren el tratamiento quirúrgico como primera opción. Los criterios clásicos fueron años de resección de próstata (RTUP) y, en caso de Hipertrofia Prostática severa, la técnica abierta.
Procedimientos no Invasivos
En los últimos años, se han desarrollado nuevos procedimientos quirúrgicos menos invasivos y producen resultados similares a las técnicas convencionales, incluyendo:
- HoLEP
- Ablación por radiofrecuencia
- Láser de diodo
- Ablación con vapor y nucleación con vapor