La culpa y el autocastigo

La culpa y el autocastigo

Editado por: el 10/10/2023

Freud explica la culpa como el “dolor psíquico” que se impone el propio individuo por haber traicionado a otro y por poner en riesgo su amor. De esta forma, culpa, amor y pulsión se encuentran en estrecha relación.

 

 

La culpa se expresa en forma de castigos que cada persona -a partir de sus creencias- se autoimpone para sentirse liberada o sanada; algunas incluso buscan que alguien más ejerza el castigo.

 

La culpa confronta al individuo con sus concepciones sobre lo correcto y lo incorrecto. Es en este momento cuando se puede identificar lo que en nuestra cultura hemos llamado “toma de conciencia” o “cargo de conciencia”; esa voz interna que obliga a confesar los errores o a buscar un castigo para conseguir la absolución, para pagar por las trasgresiones cometidas como camino para la paz interna.

 

Algo pasa en el proceso de crecimiento que hace que los seres humanos introyecten conductas prohibidas, que con el paso del tiempo las vuelvan parte de sí mismos y persistan en su ejecución a pesar de la culpa, incluso con el fin de sentir alivio después autocastigarse.

 

Sin embargo, muchas personas llegan a sentir culpa por situaciones de las que fueron víctimas o por acciones de otros; por ejemplo, un abuso sexual u otro tipo de violencia en su contra. Por ello, es importante acudir a terapia en cuanto haya alguna señal de alerta.

 

¿En qué momento es necesario acudir a terapia a causa de la culpa?

 

Es importante que las personas busquen ayuda psicoterapéutica cuando sus intentos de resolver la culpa hayan resultado infructuosos; si se intensifican los autorreproches, la necesidad de castigo o de realizar sacrificios que conllevan mayor sufrimiento. Es común que la culpa aparezca durante un cuadro de Depresión.

Psicología en Benito Juárez