Síndrome de Salida Torácica: sin sintomatología clara

Síndrome de Salida Torácica: sin sintomatología clara

Editado por: TOP DOCTORS® el 10/04/2023

El Síndrome de Salida Torácica es un conjunto de signos y síntomas como resultado de una compresión intermitente o mecánicamente inducida, e inclusive, permanente, de las estructuras neurovasculares que pasan por este espacio anatómico conocido como salida torácica.

 

Causas que originan el Síndrome de Salida Torácica

 

Las causas pueden ser múltiples, pero vamos a reconocer, para este síndrome, dos grandes componentes:

 

  • Factores Predisponentes: encontramos anomalías morfológicas o variantes anatómicas. Entre ellas, encontramos las megaapófisis transversas, las costillas cervicales, bandas accesorias musculares intercalénicas o fibromusculares, como el escalenominos, por ejemplo
  • Factores Desencadenantes: microtrauma repetitivo en la musculatura cervical o un trauma agudo como es el Síndrome de Latigazo, o bien el tener una variante anatómica es un factor predisponente, no por tener una megaapófisis transversa, quiere decir que lo voy a tener, solo me predispone, pero requiero del factor desencadenante. Hay personas que, sin tener una causa previa, simplemente con el micro trauma repetitivo o el mecanismo de latigazo, pueden desarrollar el síntoma

Síndrome de Salida Torácica: compresión intermitente o permanente, de las estructuras neurovasculares que pasan la salida torácica

Síntomas del Síndrome de Salida Torácica

 

No hay síntomas específicos, éstos son bastante vagos, van desde dolor, parestesia, sensación de pesadez, hasta Edema de la extremidad y pérdida de fuerza. Es por ello que se puede llegar a confundir con muchos otros diagnósticos antes de llegar a Síndrome de Salida Torácica, como la Discopatía Cervical, atrapamientos de nervio periférico, como el del túnel cubital o el Síndrome del Túnel del Carpo, por ejemplo.

 

En general, se habla de tres grupos de síndromes que puede presentar:

 

  • Tipo Neurogénico, que se presenta en el 90% de los casos
  • Tipo Venoso, que se presenta en más de cinco por ciento de los casos
  • Tipo Arterial, en menos de cinco por ciento de los casos

 

¿Cómo se diagnostica el Síndrome de Salida Torácica?

 

Para empezar, tenemos tres componentes: el factor clínico, el factor electrofisiológico y el factor de imagenología clínica. Desde el punto de vista clínico, la sintomatología es bastante vaga. Se han desarrollado algunas pruebas terapéuticas, como, por ejemplo, la infiltración de músculos escalenos, pero no han dado los resultados más apropiados.

 

Después vienen las pruebas electrofisiológicas, como son los potenciales evocados hemato - sensoriales y la electromiografía que, aunque pueden dar información, no son precisos para decir si es un Síndrome de Salida Torácica.

 

La imagenología se vale de:

 

  • Rayos X: buscando el esguince cervical o las variantes anatómicas
  • Ultrasonido: para el estudio directo de las raíces de los nervios y el plexo braquial, así como de la musculatura escalena
  • Angiotomografía Computada: para la valoración de las estructuras osteomusculares de la cintura escapular y el compromiso vascular, así como la resonancia magnética para el estudio de la columna cervical y del plexo braquial en general

 

En lo que a mí compete, que es lo relacionado a la imagenología, la mejor herramienta para el abordaje de Síndrome de Salida Torácica es el Ultrasonido de Salida Torácica más la Angiotomografía Computada de Salida Torácica.

 

Tratamiento para el Síndrome de Salida Torácica

 

Curiosamente el tratamiento definitivo del Síndrome de Salida Torácica se desarrolló mucho antes que otros (como el del Síndrome del Túnel del Carpo) a mediados del siglo pasado. Sin embargo, los avances quirúrgicos han sido progresivos, inicialmente empezaban con escalenectomías completas y se iban a recepción de primera costilla por abordajes axilares.

 

En la actualidad, desde el punto de vista quirúrgico, es la liberación de las estructuras neurovasculares en la salida torácica. Se pueden hacer escalenectomías parciales, en casos muy selectos, se hacen osteotomías de la primera costilla, ya no tan cruento como se llegó a hacer en un principio.

 

Sin embargo, el tratamiento no va a ser únicamente quirúrgico, hay que tomar en cuenta que también que la terapia de física antes de una cirugía, puede ser suficiente para manejar el síndrome, pero en algunas ocasiones, no hay más que el quirúrgico.

 

 

Radiología en Cuauhtémoc