La Disección Aórtica emerge como una condición de extrema gravedad, caracterizada por el desgarro de la capa más interna de la aorta, la arteria principal que irriga el corazón y el cuerpo humano.
Este desgarro conlleva a la entrada de sangre a través de las paredes aórticas, ocasionando el colapso progresivo del vaso y obstruyendo el flujo sanguíneo hacia los órganos, incluidas las extremidades.
Síntomas reveladores y signos de alerta
El síntoma cardinal de la Disección Aórtica es el dolor torácico agudo, descrito frecuentemente como lancinante y con una sensación que se irradia hacia la espalda.
A menudo, se acompaña de:
· Dificultad respiratoria
· Desmayos
Ante la presencia de estos síntomas, es imperativo buscar evaluación médica urgente, dado el alto riesgo que representa esta enfermedad para la vida y la función de diversos órganos.
Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico temprano es esencial para iniciar el tratamiento adecuado y evitar complicaciones graves. Se pueden emplear técnicas de imagen, como la Tomografía Computarizada o la Resonancia Magnética, para confirmar el diagnóstico de Disección Aórtica.
En cuanto al tratamiento, existen dos enfoques principales. El primero implica cirugía cardiotorácica abierta, que busca reparar el desgarro de la aorta.
La segunda opción, aplicable en casos de disección distal de la aorta, es el tratamiento percutáneo, que implica la colocación de endoprótesis para estabilizar la pared aórtica y restaurar el flujo sanguíneo hacia los órganos afectados.
Factores de riesgo y prevención
Los individuos con hipertensión arterial no controlada representan un grupo de alto riesgo para el desarrollo de Disección Aórtica, subrayando la importancia de un seguimiento y tratamiento riguroso de esta condición.
Además, pueden aumentar el riesgo de esta enfermedad otras condiciones, como:
· Enfermedades del tejido conectivo
· Síndromes congénitos
· Traumatismos torácicos graves
· Embarazo
La detección temprana y la intervención oportuna son cruciales para un pronóstico favorable y la preservación de la salud cardiovascular.