La Electrofisiología Cardíaca es una subespecialidad de la cardiología que se dedica al estudio del sistema eléctrico del corazón y a la corrección de los trastornos del ritmo cardíaco. Gracias a sus avances tecnológicos, hoy en día es posible diagnosticar con gran precisión y tratar de manera efectiva arritmias complejas que antes requerían tratamientos menos eficaces o más invasivos.
¿Qué es la Electrofisiología Cardíaca?
El corazón funciona gracias a impulsos eléctricos que marcan su ritmo. Cuando este sistema falla, aparecen arritmias, que pueden ser latidos demasiado rápidos, lentos o irregulares.
La electrofisiología permite estudiar estas alteraciones mediante un procedimiento llamado Estudio Electrofisiológico, que registra la actividad eléctrica desde dentro del corazón usando catéteres especiales.
Esta rama no solo se limita al diagnóstico: también ofrece tratamientos definitivos como la Ablación con catéter, que destruye pequeñas áreas de tejido responsables de la Arritmia.
Principales Herramientas y Procedimientos
Los electrofisiólogos utilizan técnicas mínimamente invasivas para estudiar y corregir arritmias. Entre las más destacadas están:
- Estudio electrofisiológico: procedimiento diagnóstico que localiza con precisión el origen de la arritmia
- Ablación con radiofrecuencia o crioablación: tratamiento que elimina el foco de la arritmia aplicando calor o frío extremo
- Implante de dispositivos: como marcapasos o desfibriladores automáticos (DAI) para regular el ritmo y prevenir muerte súbita
- Mapeo electroanatómico: tecnología 3D que crea un “mapa eléctrico” del corazón para guiar el tratamiento
Candidatos para un Procedimiento de Electrofisiología
No todas las arritmias requieren un tratamiento invasivo, pero hay casos en los que la intervención de un electrofisiólogo es fundamental.
Algunas condiciones que pueden requerir estos procedimientos son:
- Taquicardia supraventricular: ritmo rápido que se origina en las aurículas
- Fibrilación auricular: latido irregular y desorganizado de las aurículas
- Taquicardia ventricular: ritmo rápido que se origina en los ventrículos, potencialmente grave
- Síndrome de WPW (Wolff-Parkinson-White): conexión eléctrica anormal que causa taquicardias recurrentes
Antes de decidir el tratamiento, se realiza una evaluación completa con electrocardiograma, monitoreo Holter y, en algunos casos, pruebas de esfuerzo o resonancia magnética cardíaca.
Procedimiento Paso a Paso
Un estudio o ablación electrofisiológica se realiza en una sala especializada de Electrofisiología o Hemodinamia:
- Preparación: el paciente recibe anestesia local y sedación ligera.
- Acceso venoso: se introduce un catéter por la vena femoral o subclavia.
- Estudio eléctrico: se estimula el corazón para reproducir la arritmia y localizar su origen.
- Tratamiento: si se encuentra el foco, se aplica energía de radiofrecuencia o frío para eliminarlo.
- Recuperación: el paciente permanece en observación y, en la mayoría de los casos, regresa a casa el mismo día o al siguiente.
Recuperación y Cuidados
Tras el procedimiento, los cuidados son simples:
- Evitar esfuerzos físicos intensos durante la primera semana
- Mantener el sitio de punción limpio y seco
- Acudir a controles periódicos con el cardiólogo electrofisiólogo
- Estar atento a síntomas como palpitaciones, mareos o dificultad para respirar
La gran mayoría de los pacientes experimentan una mejora notable en su calidad de vida y, en muchos casos, se curan definitivamente de la arritmia.
¿A qué especialista acudir?
El profesional encargado de realizar estos estudios y tratamientos es el Cardiólogo o Electrofisiólogo, son médicos especializados en el sistema eléctrico del corazón. Si experimentas palpitaciones, mareos, desmayos o diagnósticos previos de arritmia, es recomendable acudir a un electrofisiólogo para una valoración precisa y un plan de tratamiento personalizado.