Las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) siguen siendo uno de los principales motivos de consulta en Urología, no solo por su frecuencia, sino también por las complicaciones silenciosas que pueden provocar si no se detectan y tratan a tiempo.
Desde infecciones aparentemente leves hasta cuadros que afectan la fertilidad y la salud general, conocer cuáles son las más comunes y cómo reconocer sus señales de alerta es el primer paso hacia la prevención y el cuidado responsable de la salud sexual.
¿Cuáles son las Enfermedades de Transmisión Sexual más frecuentes que atiende un urólogo en consulta?
Las ETS más comunes en la consulta urológica son:
- VPH (Verrugas Genitales)
- Clamidia (frecuentemente asintomática)
- Gonorrea
- Herpes Genital (VHS-2)
- Tricomoniasis
- Sífilis (ha repuntado en los últimos años)
Síntomas comunes que deben alertar a un hombre para acudir a revisión médica por sospecha de ETS
Cualquier de estos síntomas requiere consulta médica inmediata:
- Secreción o líquido anormal del pene (pus, blanco, amarillo o verde)
- Dolor o ardor al orinar o eyacular
- Llagas, úlceras, ampollas o bultos en el pene, testículos, ano o boca
- Picazón, enrojecimiento o irritación en la zona genital
- Dolor durante las relaciones sexuales o en la parte baja del abdomen
Es importante destacar que muchas ETS son asintomáticas. Por lo que, si has tenido una relación sexual de riesgo (sin protección o con una pareja nueva), debes hacerte la prueba aunque no tengas síntomas.
Riesgos de no tratar a tiempo una ETS en hombres
Las complicaciones pueden ser graves:
- Prostatitis: Infección de la Próstata
- Epididimitis: inflamación del epidídimo (estructura detrás del testículo), que puede causar dolor e Infertilidad
- Infertilidad: por cicatrización y obstrucción de los conductos por donde pasan los espermatozoides (común en clamidia y gonorrea no tratadas)
- Transmisión a parejas sexuales
- Mayor riesgo de contraer otras ETS, como el VIH, debido a la inflamación y las lesiones
- Propagación de la infección a otras partes del cuerpo (artritis, problemas cardíacos, neurológicos -especialmente con la Sífilis-)
¿Qué papel tiene la educación sexual en la prevención de las Enfermedades de Transmisión Sexual?
Es fundamental. Una educación sexual completa, basada en evidencia científica y sin estigmas, empodera a las personas para:
- Comprender los riesgos y los modos de transmisión
- Tomar decisiones informadas sobre su sexualidad
- Normalizar el uso de preservativos y otras medidas de protección
- Perder el miedo a realizarse pruebas rutinarias y hablar abiertamente con sus parejas y médicos
- Desterrar mitos y reducir el estigma, fomentando así un entorno de responsabilidad compartida
Exámenes o pruebas recomendadas por Urólogos para la detección temprana de ETS
Depende de la práctica sexual y los síntomas, pero pueden incluir:
- Análisis de Orina: Para detectar Clamidia y Gonorrea
- Muestras de fluido uretral, faríngeo o rectal: Mediante hisopos para cultivos o pruebas moleculares (PCR) para Clamidia y Gonorrea
- Análisis de sangre: Para detectar VIH, Sífilis, y hepatitis B y C
- Exploración física: Para identificar verrugas, úlceras o lesiones herpéticas
Además, se recomienda hacerse pruebas regularmente si se es sexualmente activo con múltiples parejas o si se tienen relaciones sin protección.
¿Cómo influye el uso del preservativo en la prevención de estas enfermedades?
El preservativo (masculino o femenino), usado correcta y consistentemente en cada relación sexual, es el método de barrera más eficaz para reducir la transmisión de la mayoría de las ETS, especialmente de aquellas que se transmiten por fluidos (VIH, clamidia, gonorrea).
Para las que se transmiten por contacto piel con piel (VPH, Herpes), reduce el riesgo, pero no lo elimina por completo.
¿Las ETS pueden afectar la fertilidad masculina si no se tratan adecuadamente?
Sí, absolutamente. Infecciones como la Clamidia y la Gonorrea no tratadas son causas comunes de infertilidad masculina. Pueden causar cicatrización y obstruir los conductos deferentes (los tubos que transportan los espermatozoides), lo que se conoce como obstrucción de los conductos eyaculatorios. También la inflamación crónica puede afectar la calidad y movilidad de los espermatozoides.
"Tu salud sexual es una parte crucial de tu salud general y bienestar. No es un tema de vergüenza, sino de responsabilidad. Vacúnate contra el VPH y la Hepatitis B. Usa siempre condón. Habla abiertamente con tus parejas sobre su historial sexual y el uso de protección. Hazte las pruebas de forma regular; es un acto de cuidado propio y hacia los demás. Un diagnóstico a tiempo es sinónimo de un tratamiento sencillo y evita complicaciones graves a futuro. No dejes que los mitos o el miedo te impidan cuidarte."