La Mastopexia es un procedimiento quirúrgico diseñado para levantar y rejuvenecer el contorno mamario, devolviendo a los senos una apariencia más firme y armónica.
Es una intervención cada vez más solicitada, tanto con fines estéticos como reconstructivos, especialmente en mujeres que han experimentado cambios en sus mamas a lo largo del tiempo debido a factores como la edad, Embarazos o Pérdida de Peso.
¿Cuándo se recomienda una Mastopexia?
La Mastopexia está indicada principalmente en mujeres que presentan Ptosis Mamaria, es decir, caída de los senos. Esta condición puede ser el resultado de:
- Factores naturales, como la genética o el envejecimiento
- Cambios fisiológicos, como los ocurridos después del Embarazo y la Lactancia
- Volumen mamario excesivo, que favorece la flacidez con el tiempo
Además del descenso de los senos, muchas pacientes buscan esta cirugía para corregir alteraciones en la forma o posición del complejo areola-pezón, buscando restaurar la imagen corporal que tenían antes de esos cambios.
¿En qué se diferencia una Mastopexia Estética de una Oncológica?
Existen dos contextos principales para realizar una Mastopexia:
Mastopexia estética
Tiene como objetivo recuperar la forma, firmeza y simetría de las mamas, generalmente con base en el deseo de la paciente de volver a lucir un aspecto similar al que tenía en su juventud o antes de la maternidad. Puede incluir o no el uso de Implantes Mamarios.
Mastopexia oncológica
Se utiliza como parte de la Reconstrucción Mamaria en pacientes que han sido sometidas a una cirugía conservadora del Cáncer de Mama, como una Tumorectomía. Estas cirugías pueden dejar deformidades o asimetrías, que se corrigen con Mastopexia:
- Reposicionando tejidos para recuperar la forma natural de la mama
- En caso de cirugía unilateral, se realiza una Mastopexia en la mama contralateral para lograr simetría
Tipos de Mastopexia según la técnica quirúrgica
La elección de la técnica depende principalmente de la cantidad de piel y tejido que debe removerse y de cuánto necesita reposicionarse el complejo areola-pezón. Las cicatrices varían en extensión:
1. Mastopexia periareolar o circunferencial
- La cicatriz se limita al contorno de la areola
- Indicada en casos de caída leve y con mínima necesidad de reposicionamiento
2. Mastopexia vertical o circunvertical
- Incluye una cicatriz alrededor de la areola más una línea vertical hacia el polo inferior
- Se utiliza cuando se requiere mayor levantamiento y remodelación de tejido
3. Mastopexia en ancla o T invertida
- Combina la técnica vertical con una incisión horizontal en el surco submamario
- Se reserva para casos con flacidez severa y gran exceso de piel
¿Cómo se determina la técnica adecuada para cada paciente?
Cada paciente es evaluada de forma individual. Algunos de los factores que determinan la técnica a utilizar incluyen:
- Volumen mamario y exceso de piel
- Grado de caída del complejo areola-pezón
- Medidas anatómicas específicas, como la distancia desde el esternón, hombros o brazos
- Objetivos estéticos y preferencias personales de la paciente
Cuando el desplazamiento necesario del complejo areola-pezón es leve, se opta por técnicas menos invasivas. En cambio, si debe moverse varios centímetros, se requiere mayor movilización y, por ende, incisiones más amplias.
Complicaciones posibles de la Mastopexia
Aunque se trata de una cirugía segura en manos expertas, como cualquier procedimiento quirúrgico, la Mastopexia no está exenta de riesgos.
Las complicaciones pueden clasificarse según el momento en que ocurren:
Durante la cirugía:
- Sangrado, que debe ser controlado en quirófano
Inmediatamente después de la cirugía:
- Hematoma, acumulación de sangre en el área operada, que puede requerir vigilancia hospitalaria temporal
En el postoperatorio tardío:
- Cicatrices hipertróficas o inestéticas, influenciadas por factores como el tabaquismo, enfermedades metabólicas o reinicio precoz de la actividad física
- Dehiscencia de la herida quirúrgica, es decir, apertura de la cicatriz en zonas de mayor tensión
- Alteraciones de la sensibilidad mamaria, generalmente transitorias. En Mastopexias simples, la sensibilidad suele mejorar en unas tres semanas; en casos oncológicos, este proceso puede extenderse de 3 a 6 meses
El riesgo de estas complicaciones se minimiza seleccionando adecuadamente la técnica quirúrgica y brindando un seguimiento posoperatorio riguroso.
Avances tecnológicos en Mastopexia
En los últimos años, se han incorporado herramientas que mejoran la eficacia y durabilidad de los resultados quirúrgicos, como:
Matriz dérmica acelular
Utilizada sobre todo en reconstrucciones mamarias con implantes. Esta técnica proporciona soporte adicional a los tejidos y mejora el contorno mamario. Sin embargo, tiene un costo elevado, por lo que se indica sólo en casos bien seleccionados.
Mallas hidrolizables
Funcionan como un brasier interno temporal que brinda soporte durante los primeros meses. Con el tiempo, el material se desintegra sin dejar residuos. Además, contribuyen a reducir la recurrencia de la caída mamaria.
Estos avances no son necesarios en todos los casos, pero representan una opción útil para ciertas pacientes con indicaciones específicas.
La Mastopexia es una intervención eficaz para mejorar el aspecto estético y funcional de las mamas, ya sea con fines cosméticos o como parte de una Reconstrucción Oncológica. La elección de la técnica adecuada, una evaluación personalizada con un especialista en Cirugía Plástica y un seguimiento posoperatorio cuidadoso son claves para obtener resultados satisfactorios.
Además, las nuevas tecnologías quirúrgicas ofrecen herramientas valiosas para lograr una mejor proyección, simetría y durabilidad en los resultados, siempre valorando cuidadosamente su costo y utilidad en cada caso.