Proceso mediante el cual se introducen gradualmente alimentos sólidos, semisólidos o líquidos distintos de la leche materna o la fórmula infantil en la dieta de un bebé.
¿Qué es la Alimentación Complementaria?
Es el proceso de ofrecer al bebé alimentos distintos a la leche (humana o fórmula), complementando, no reemplazando, el aporte nutricional de la leche, en especial de aquellos nutrimentos que la leche ya no cubre.
Sin embargo, no se trata sólo de qué alimentos ofrecer y cuánto dar, sino que viene en un marco de crianza respetuosa que apoye al desarrollo físico, cognitivo y emocional, en el que buscamos generar un ambiente positivo para comer, buena relación con los alimentos y respetando el ritmo de cada bebé.
¿A qué edad se debe comenzar la alimentación complementaria y por qué?
Idealmente a los 6 meses si el bebé recibe lactancia materna exclusiva. En bebés que usan fórmula, puede ser entre los 4 y 6 meses, siempre con orientación profesional.
¿Cuáles son los signos que indican que un bebé está listo para comenzar con la alimentación complementaria?
Los signos de que un bebé está listo para comer no son la única razón por la que debemos o no empezar alimentación complementaria. En general se busca que haya desaparecido el reflejo de empujar con la lengua y muestre interés por los alimentos.
¿Cuáles son los riesgos de iniciar demasiado temprano o demasiado tarde?
- Demasiado temprano (<4 meses): riesgo de atragantamiento, menor absorción de hierro y zinc, más infecciones (Gastroenteritis, Enfermedades Respiratorias) y desplazar tomas de leche necesarias
- Demasiado tarde (>7-8 meses): deficiencias nutricionales (sobre todo hierro y zinc), mayor riesgo de rechazar texturas y sabores, problemas en el desarrollo oral y del habla
¿Cuál es el orden sugerido para introducir diferentes grupos alimenticios?
No hay un orden obligatorio, pero se recomienda que desde el inicio se ofrezcan alimentos variados de todos los grupos (frutas, verduras, cereales, alimentos fuente de proteína como alimentos de origen animal, leguminosas y derivados lácteos) y que se presenten todos los sabores (dulce, salado, amargo, ácido, umami). A las 4 semanas ya deberían haberse ofrecido al menos 2 alimentos de cada grupo.
¿Qué nutrimentos son prioritarios durante esta etapa?
Principalmente: Hierro, zinc, calcio, vitamina A y folato. Por eso, se promueve el uso de alimentos ricos en estos nutrientes como carne, vísceras, y cereales fortificados (sin azúcar)
¿Cuáles son los errores más frecuentes que cometen los padres al iniciar la Alimentación Complementaria?
- Introducir los alimentos antes de los 4 meses o retrasarlos sin razón
- Ofrecer poca variedad o siempre lo mismo
- No repetir alimentos rechazados (a veces se necesitan hasta 10-15 exposiciones)
- Dar solo purés y no avanzar a texturas grumosas antes de los 10 meses
- Ofrecer poca cantidad o comidas sin adecuada densidad energética
- Asumir que, si no le gusta a la primera, ya no lo aceptará
- No permitir que los bebes exploren los alimentos
- No compartir los tiempos de comida del bebé con al menos un cuidador
- Retrasar la introducción de alimentos potencialmente alergénicos
¿Cuándo es necesario acudir al Pediatra o a un Nutricionista infantil durante la Alimentación Complementaria?
Tu Pediatra te puede dar una guía sobre cómo realizar este proceso. Una consulta con Nutrición Pediátrica te ayudará a cómo planear de manera óptima la alimentación complementaria bajo un marco de alimentación perceptiva y cuidando el óptimo crecimiento y desarrollo.
Adicionalmente, puede ser de gran ayuda:
- Si el bebé no está ganando peso como debería
- Si hay dudas sobre cómo introducir los alimentos (especialmente si se quiere usar BLW o BLISS)
- Si hay alergias o sospecha de Alergias
- Si el bebé rechaza constantemente los alimentos o tiene problemas para avanzar en las texturas
- Si los cuidadores necesitan orientación personalizada, especialmente en bebés prematuros o con condiciones especiales
