Cirugía de columna de mínima invasión, lo que se debe saber
Hablar de una cirugía de columna es un tema delicado, ya que los riesgos son muy altos y, dada su naturaleza, el paciente se pone en extremo nervioso antes del procedimiento. La tecnología ha avanzado muchísimo y cada vez más personas se someten a una cirugía de columna mínimamente invasiva (conocida también como cirugía endoscópica tubular de columna), la cirugía se hace entre los músculos, con heridas pequeñas que definitivamente facilitan la recuperación de los enfermos y minimizan el trauma.
CIRUGÍA TRADICIONAL VS. CIRUGÍA TUBULAR
El principal problema de la cirugía de columna es que se deben realizar incisiones grandes para poder llegar hasta la parte lesionada, lo que genera una gran pérdida de sangre, posteriores cicatrices y las complicaciones propias que se derivan de la larga duración de las intervenciones. La ciencia se ha preocupado por esto y se ha podido evolucionar hacia la cirugía de columna mínimamente invasiva, (siempre que sea posible realizarla), porque sus posibles secuelas son mucho menores, las cicatrices, si bien no son imperceptibles, sí son más pequeñas comparadas a la de la cirugía abierta y el daño a la masa muscular circundante también es mínimo. Todo esto se traduce en una rápida recuperación del paciente. El especialista debe evaluar previamente al paciente para poder recomendar esta intervención, ya que se requieren ciertas características adecuadas para poderla realizar.
¿SABÍAS QUÉ EL DOLOR LUMBAR ES UNO DE LOS MÁS FRECUENTES ENTRE LA POBLACIÓN Y QUE HASTA EL 10% DE LOS PACIENTES PUEDEN PRESENTAR ESE DOLOR DE MANERA CRÓNICA?
La cirugía de columna de mínima invasión consiste en realizar una incisión muy pequeña (aproximadamente de 15 milímetros) para poder introducir una cánula; a través de ella ponen una serie de tubos y un microscopio óptico especial que permiten ampliar la zona a trabajar para mayor precisión. Nos orientamos con Rayos X Intraoperatorios y nos acompaña un Neurofisiólogo para asegurar que no lastimemos una raíz nerviosa.
QUÉ ESPERAR DE ESTA CIRUGÍA
Hay que señalar que es importante hacer un diagnóstico personalizado de cada paciente para poder valorar la operación que más le conviene. Si bien es cierto que las ventajas son muchas y el tratamiento quirúrgico es ampliamente recomendable cuando hay evidencia de lesión neurológica, también existe una
pérdida de fuerza o pudiera haber alteraciones en la sensibilidad posteriormente. La cirugía es efectiva en pacientes en los que el grado de dolor ya es demasiado elevado y no ha cedido con el tratamiento médico, de ahí que se busque eliminar el padecimiento de la manera más eficaz posible.
La preparación para la cirugía de columna mínimamente invasiva, por lo regular se realiza en un medio día, después de realizarse se pasa al paciente a recuperación por el resto de la tarde-noche y al día siguiente puede irse a casa. Como se notará, el tiempo de ingreso hospitalario se reduce drásticamente en comparación a cuando se trata de una cirugía abierta o mayor. No porque no sea considerada de esta manera al ser de mínima invasión, sino que las cicatrices no requieren de cuidados tan especiales o prolongados que con anterioridad sí se solían procurar.
DESPUÉS DE SALIR DEL HOSPITAL EL PACIENTE PUEDE COMENZAR POCO A POCO A LLEVAR SU VIDA NORMAL, PERO LIMITANDO ACTIVIDADES DEPORTIVAS O EJERCICIOS FÍSICOS AGRESIVOS. ALREDEDOR DE 6 A 12 SEMANAS DESPUÉS YA PUEDEN VOLVER A SU VIDA COTIDIANA NORMAL.
Para un mayor conocimiento de las alternativas que se tienen en el ámbito de la cirugía de columna, es fundamental recurrir a un especialista en Neurocirugía, él será el indicado para determinar el tipo de tratamiento a seguir.
OTRAS ALTERNATIVAS
• Cirugía abierta de columna. Se usa para corregir el dolor de espalda, en especial cuando una hernia discal comprime una raíz nerviosa.
• Cirugía percutánea de columna. Cirugía a través de agujas o cánulas pequeñas. Se abren menos de 10 mm y se usa en casos selectos.