Conoce las diferencias entre Rinoseptoplastía y Rinoplastía
La Rinoseptoplastía es la intervención quirúrgica más solicitada para la remodelación de la nariz.
Dos tipos de Rinoseptoplastía
La Rinoseptoplastía puede realizarse con 2 finalidades: corregir una deformidad antiestética, eliminar un problema respiratorio o ambas cosas.
Según esto, podemos clasificar a la Rinoseptoplastía en:
- Rinoseptoplastía Estética o Rinoplastía: pretende corregir la forma externa de la nariz en casos en los que existe alguna deformidad antiestética
- Rinoseptoplastía Funcional: busca corregir un problema respiratorio más que un problema estético
En general, la Rinoseptoplastía es un procedimiento complejo que requiere de un gran entrenamiento y formación del cirujano. El tipo de técnica empleada dependerá de las correcciones que el paciente precise. En algunos casos podrá ser necesaria la obtención de fragmentos de cartílago que proporcione injertos para reparar las distintas estructuras de la nariz que así lo precisen. Este cartílago puede obtenerse en la mayoría de los casos del propio tabique nasal y en raras ocasiones, de la oreja o de las costillas.
Objetivos de la Rinoplastía
La Rinoplastía como tal, está especialmente indicada en aquellas personas que tengan problemas estéticos en relación a una nariz demasiado grande o pequeña, o con desviación de la raíz nasal. También permite la modificación de elementos de la nariz como son la punta nasal, las narinas, la columela o el filtrum.
Los objetivos de tratamiento más frecuentemente solicitados son:
- Estrechar la punta
- Reducir el dorso haciéndolo recto
- Estrechar la nariz
- Hacer que la punta tenga un aspecto más respingado
- Colocr injertos de cartílago para rellenar o mejorar la proyección en diferentes zonas de la nariz
- Corregir las desviaciones de tabique
Los resultados definitivos de la Rinoplastía no son visibles hasta 6 meses después de la cirugía debido a la inflamación de la nariz.
Afortunadamente no existe ningún límite de edad para ser intervenido.