Menorragia: el problema de la menstruación abundante
La Menorragia es el sangrado menstrual excesivo tanto en duración como en cantidad, que se acompaña de expulsión de coágulos. Este problema afecta la calidad de vida de las pacientes.
Un sangrado menstrual normal tiene una duración de 2 a 5 días, en donde se pierden de 70 a 80 ml de sangre y no hay expulsión de coágulos. En la Menorragia salen de 160 a 400 ml de sangre.
¿Cómo saber si padezco Menorragia?
Hay algunas señales que podrían indicar que una persona tiene este problema de salud, tales como:
- Cambio frecuente de toallas sanitarias o tampones (cada hora o cada dos horas)
- Periodos con duración de más de siete días
- Presencia de coágulos de sangre de más de 2.5 cm
¿Qué tan frecuente es?
La Menorragia es un padecimiento común que muchas pacientes ven normal, ya que siempre han menstruado con la misma abundancia. Como resultado, más del 50% de las mujeres que padecen esta condición desarrollan Anemia, pues la pérdida excesiva de sangre menstrual provoca deficiencia de hierro a largo plazo.
Esto sucede porque el menstruar se pierden los glóbulos rojos (el principal componente celular de la sangre), esenciales para transportar oxígeno por todo el cuerpo. Al tener sangrados menstruales abundantes durante muchos meses se perderán más glóbulos rojos de lo normal.
¿Qué debo hacer si tengo periodos abundantes?
Si consideras que puedes padecer Menorragia, lo mejor que puedes hacer es acudir con una persona especializada en Ginecología y Obstetricia, quien te hará un interrogatorio sobre tus ciclos menstruales para darte un diagnóstico oportuno. Las preguntas pueden estar relacionadas con la cantidad de toallas sanitarias que utilizas, la frecuencia con la que las cambias y si llegas a manchar tu ropa por accidente.
Es probable que te indiquen estudios como Ultrasonido Pélvico o Endovaginal para descartar otras causas de sangrado menstrual abundante, como la presencia de Miomas Uterinos o crecimiento excesivo del endometrio. También se pueden realizar estudios sanguíneos para descartar la presencia de Anemia, trastornos en la coagulación o alteraciones hormonales.
El tratamiento de la Menorragia consiste en la ingesta de medicamentos, incluidos anticonceptivos o ácido tranexámico, el cual favorece la coagulación de la sangre. Si las causas de la Menorragia son Miomas o Pólipos, es posible que sea necesario recurrir a intervenciones quirúrgicas.