Los medicamentos que solemos consumir con frecuencia de forma oral son absorbidos sistémicamente con la posibilidad de afectar diversos órganos, incluidos los ojos.
Recientemente, se ha revelado que gran parte de los medicamentos utilizados con frecuencia pueden generar efectos adversos oculares y algunos podrían ocasionar la perdida irreversible de la visión.
Los medicamentos que solemos consumir con frecuencia de forma oral son absorbidos sistémicamente con la posibilidad de afectar diversos órganos, incluidos los ojos al ser uno de los órganos con mayor suministro de sangre y menor tamaño.
¿Qué estructuras se pueden afectar?
Las estructuras que más se ven afectadas son:
- Mácula
- Iris
- Córnea
- Retina
- Nervio Óptico
- Cámara Anterior
¿Cuáles son los fármacos que más afectan?
Los medicamentos pueden causar síntomas característicos de diversas enfermedades oculares como:
- Anticolinérgicos: Provocan relajación del musculo ciliar y con ello visión borrosa temporal, también pueden ocasionar Glaucoma de ángulo cerrado
- Bifosfonatos: Pueden ser los precursores de Conjuntivitis, Epiescleritis, Escleritis, Queratitis y Uveítis y los síntomas pueden empezar a desarrollarse entre las 6 y 8 semanas
- Fenotiazinas: Pueden causar cambios en el desarrollo epitelial provocando Edemea Corneal, mismo que puede volverse permanente
- Corticosteroides: Son causantes de la aceleración de las Cataratas y el aumento de la presión intraocular
- Cloroquina e Hidroxicloroquina: Su riesgo radica en causar el desarrollo de la degeneración de la retina
- Etambutol: Puede causar neuropatía óptica
Así como estos y otros medicamentos el riesgo de efectos secundarios es inminente, sin embargo, siempre se recomienda consumirlos bajo prescripción médica. Algunas de las opciones de tratamiento es la reducción de la dosis o la suspensión del mismo. Es importante acudir con un especialista en Oftalmología ante la presencia de síntomas de alguna de estas enfermedades.