Reflujo Gastroesofágico: Síntomas, causas y tratamiento definitivo
El Reflujo Gastroesofágico es una enfermedad cada vez más frecuente que afecta a personas de todas las edades. No se trata solo de una molestia ocasional por "agruras" o acidez, sino de una condición crónica, progresiva y multifactorial que puede causar daño significativo al esófago y a otros órganos, impactando de forma importante la calidad de vida.
¿Qué es el Reflujo Gastroesofágico?
La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE) ocurre cuando el contenido del estómago, incluyendo ácido clorhídrico y bilis, asciende hacia el esófago de forma anormal. Esto sucede debido a la incompetencia del esfínter esofágico inferior (EEI), una válvula natural ubicada entre el esófago y el estómago que normalmente permite el paso del alimento, pero impide el reflujo del contenido gástrico.
Cuando este esfínter no funciona adecuadamente, las secreciones digestivas irritan la mucosa del esófago, lo que da lugar a síntomas molestos y a complicaciones potencialmente graves si no se trata de manera adecuada.
¿Qué tan común es?
Estudios recientes indican que entre el 10% y 20% de la población padece Reflujo Gastroesofágico severo. Solo en la Ciudad de México, esto representa entre 2 y 4 millones de personas. Además, se estima que al menos un 7% presenta síntomas todos los días, lo que refleja una alta carga para la salud pública.
Síntomas del Reflujo Gastroesofágico
El Reflujo Gastroesofágico puede manifestarse de diversas formas, desde síntomas digestivos típicos hasta complicaciones respiratorias o infecciones recurrentes. Los síntomas más frecuentes incluyen:
- Agruras o acidez (sensación de ardor en el pecho o la garganta)
- Regurgitación (retorno de alimento o líquidos hacia la boca)
- Dolor abdominal o torácico
- Náuseas y vómito
- Dificultad para tragar (disfagia)
- Distensión abdominal
- Meteorismo y flatulencias
También puede dar lugar a síntomas fuera del aparato digestivo, como:
- Faringitis crónica
- Asma o bronquitis recurrente
- Neumonías de repetición
- Erosión dental
- Pérdida de peso involuntaria
Estos síntomas no solo afectan el bienestar físico, sino que también interfieren con la alimentación, el sueño y la vida cotidiana del paciente.
Causas del Reflujo Gastroesofágico
La principal causa del reflujo es la incompetencia del esfínter esofágico inferior, que pierde su capacidad de cerrar adecuadamente. Sin embargo, hay otros factores que pueden contribuir:
- Hernia hiatal: muy común en personas con reflujo. Facilita el ascenso del ácido hacia el esófago.
- Trastornos motores del esófago: especialmente en enfermedades sistémicas.
- Obstrucción gástrica: que impide el vaciamiento adecuado del estómago.
¿Por qué es una enfermedad peligrosa?
El reflujo no tratado puede evolucionar. Con el tiempo, la exposición constante de la mucosa esofágica al ácido gástrico o la bilis puede producir:
- Esofagitis (inflamación del esófago)
- Úlceras esofágicas
- Sangrado
- Estenosis esofágica (estrechamiento del esófago)
- Esófago de Barrett (lesión precancerosa)
- Cáncer de esófago: uno de los más agresivos del tubo digestivo
Por esta razón, es fundamental no minimizar los síntomas ni postergar el tratamiento.
Tratamiento del Reflujo Gastroesofágico
Tratamiento médico
Tradicionalmente, el reflujo se ha tratado con medicamentos que:
- Disminuyen la acidez (como los inhibidores de bomba de protones)
- Mejoran el vaciamiento gástrico
Aunque estos fármacos pueden mejorar los síntomas, no resuelven la causa de fondo, ya que no restauran la función del esfínter esofágico. El reflujo persiste, solo que con un contenido menos ácido. Además, muchos pacientes requieren medicación de por vida y cambios dietéticos estrictos, sin garantía de evitar progresión o complicaciones.
Tratamiento quirúrgico: una solución definitiva
Gracias a los avances diagnósticos (como la pHmetría y la manometría esofágica) se puede evaluar con precisión el grado de reflujo y el estado del esfínter.
En pacientes con síntomas persistentes, recurrencia tras dejar los medicamentos o presencia de complicaciones, la Cirugía Laparoscópica Antirreflujo se ha consolidado como la mejor opción terapéutica.
Beneficios de la cirugía:
- Elimina el reflujo de forma definitiva
- Permite dejar los medicamentos
- No requiere seguir dietas estrictas
- Mejora los síntomas, la calidad de vida y previene la progresión a lesiones graves
La intervención se realiza mediante laparoscopía, una técnica mínimamente invasiva que utiliza pequeñas incisiones y una cámara de alta precisión. Esta vía quirúrgica ofrece múltiples ventajas:
- Menor dolor postoperatorio
- Menor estancia hospitalaria
- Recuperación rápida (en promedio 7 días)
- Mejores resultados estéticos
Antes de indicar la cirugía, se deben realizar estudios diagnósticos para evaluar el estado de la enfermedad y descartar otras causas.
El Reflujo Gastroesofágico es una enfermedad crónica, progresiva y potencialmente grave. No debe subestimarse, ya que puede comprometer órganos como el esófago, los pulmones, la faringe e incluso afectar la nutrición y el estado general del paciente.
Si bien los tratamientos médicos alivian los síntomas, no curan la enfermedad. En cambio, la cirugía laparoscópica representa una solución definitiva, especialmente en casos avanzados o con complicaciones, permitiendo a los pacientes recuperar su calidad de vida sin depender de fármacos ni restricciones.
Consultar al especialista en Gastroenterología ante síntomas persistentes es clave para un diagnóstico temprano y un tratamiento eficaz. No se trata solo de aliviar la acidez: se trata de proteger la salud a largo plazo.