¿Qué es la Hernia Inguinal?

¿Qué es la Hernia Inguinal?

Editado por: TOP DOCTORS® el 10/10/2023

La Hernia Inguinal puede causar dolor y molestias en la región inguinal y puede ser visible como una protuberancia en la piel. Si la Hernia Inguinal es grande o se produce una obstrucción del intestino, puede causar dolor abdominal grave y náuseas

 

La Hernia Inguinal es una protuberancia o salida de tejido u órgano a través de una debilidad o abertura en la pared abdominal. La Hernia Inguinal se produce cuando parte del intestino o del tejido abdominal se desliza a través de una debilidad en la pared abdominal en la región inguinal, que es la zona del cuerpo donde la parte inferior del abdomen se une con las piernas.

 

Existen dos tipos de hernias inguinales:

 

  • Directas: se producen cuando el tejido abdominal se desliza a través de una debilidad en la pared abdominal directamente a la región inguinal
  • Indirectas: se producen cuando el tejido abdominal se desliza a través de un orificio o canal llamado canal inguinal, que se encuentra en la región inguinal

 

La Hernia Inguinal puede causar dolor y molestias en la región inguinal y puede ser visible como una protuberancia en la piel. Si la Hernia Inguinal es grande o se produce una obstrucción del intestino, puede causar dolor abdominal grave y náuseas. La Hernia Inguinal suele ser tratada mediante cirugía para reparar la debilidad en la pared abdominal y devolver los órganos o tejidos al lugar correcto.

 

¿Cómo puedo saber si tengo una Hernia Inguinal?

 

Para saber si tienes una Hernia Inguinal, es posible que sientas una protuberancia o una masa en la región inguinal o en la parte inferior del abdomen. También es posible que sientas dolor o molestias cuando haces esfuerzos, como toser, estornudar o levantar objetos pesados.

 

Otras señales de Hernia Inguinal pueden incluir:

 

  • Dolor o molestias al sentarte o al caminar
  • Una protuberancia que se hace más evidente cuando haces esfuerzos
  • La protuberancia o masa desaparece al estar recostado(a)

 

Si sospechas que tienes una Hernia Inguinal, es importante que consultes a un médico para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados.

 

El médico puede examinar la zona y hacerte preguntas sobre tus síntomas para determinar si tienes una Hernia Inguinal y cómo se debe tratar. Además de esto, para corroborar el diagnóstico se debe hacer un ultrasonido o tomografía para complementar la exploración física.

 

¿Cómo es el tratamiento de la Hernia Inguinal?

 

El tratamiento de la Hernia Inguinal suele incluir cirugía para reparar la debilidad en la pared abdominal y devolver los órganos o tejidos al lugar correcto. La cirugía se realiza bajo anestesia y puede ser una cirugía abierta, en la que se hace una incisión en la piel para acceder a la hernia, o una Cirugía Laparoscópica, en la que se hacen varias incisiones pequeñas y se utilizan instrumentos especiales y una cámara para reparar la hernia a través de ellas.

 

El tipo de cirugía que se recomienda dependerá de varios factores, como el tamaño y la ubicación de la hernia, el estado de salud general del paciente y la preferencia del médico y del paciente. En general, la Cirugía Laparoscópica es menos invasiva que la cirugía abierta y puede tener una recuperación más rápida, pero no es adecuada para todos los casos de Hernia Inguinal y los costos suelen ser más elevados.

 

Después de la cirugía, es posible que debas tomar medicamentos para controlar el dolor y seguir ciertas recomendaciones como evitar hacer esfuerzos y seguir una serie de instrucciones de cuidado postoperatorio para ayudar a que la herida cicatrice adecuadamente y para evitar complicaciones. En general, la recuperación de la cirugía de Hernia Inguinal suele tomar dos semanas y es importante seguir las instrucciones del médico para promover una recuperación rápida y sin complicaciones.

 

¿De qué están hechas las mallas para cirugía de Hernia Inguinal?

 

Las mallas para Cirugía de Hernia Inguinal están hechas de un material sintético resistente y flexible, como el polipropileno o el polietileno. Estos materiales son biocompatibles, es decir, no causan reacciones adversas en el organismo y se integran fácilmente en el tejido circundante.

 

Las mallas para Cirugía de Hernia Inguinal se utilizan para reparar o reforzar la pared abdominal en la zona de la hernia. Se colocan encima o por detrás de la debilidad o abertura en la pared abdominal y se fijan en su lugar mediante puntos de sutura. Una vez colocadas, las mallas ayudan a reforzar la pared abdominal y a prevenir la aparición de futuras hernias en la misma zona.

 

Las mallas para Cirugía de Hernia Inguinal vienen en diferentes tamaños y formas para adaptarse a la forma de la zona a reparar. Aunque son muy efectivas para reparar hernias y reforzar la pared abdominal, algunas personas pueden experimentar complicaciones después de la cirugía, como inflamación o rechazo del material. Es importante hablar con tu médico sobre el riesgo de complicaciones y cualquier preocupación que tengas antes de decidirte por la cirugía de hernia con malla.

 

¿Cuáles son las complicaciones más comunes de la Cirugía de Hernia Inguinal?

 

La Cirugía de Hernia Inguinal es un procedimiento relativamente común y generalmente seguro que se realiza para reparar una hernia en la región inguinal. Sin embargo, como con cualquier cirugía, existe cierto riesgo de complicaciones. Algunos de los riesgos más comunes de la cirugía de Hernia Inguinal son:

 

  • Infección: es posible que se infecte la herida o el tejido cercano a la cirugía. Los signos de infección pueden incluir fiebre, dolor, enrojecimiento o pus en la herida.
  • Dolor: es posible que se sienta dolor o molestias en la zona de la cirugía después del procedimiento.
  • Rechazo o reacción a la malla: si se utiliza una malla para reparar la hernia, es posible que tu cuerpo rechace o tenga una reacción a ella. Esto puede causar inflamación o dolor en la zona de la cirugía. Con las mallas actuales esto es muy poco frecuente.
  • Complicaciones de la anestesia: es posible que ocurran complicaciones de la anestesia, como dificultad para respirar o problemas cardíacos.
  • Complicaciones de la cirugía: en raros casos, es posible que se produzcan complicaciones durante la cirugía, como sangrado o daños a los órganos o a los vasos sanguíneos cercanos.

 

Es importante recordar que estos riesgos son raros y que la mayoría de las personas se recuperan sin complicaciones después de la cirugía de Hernia Inguinal. Sin embargo, es importante hablar con tu médico sobre cualquier preocupación o pregunta que tengas antes de decidirte por la cirugía.

Cirugía General en Cuauhtémoc