La betaína y su relación con la Obesidad infantil

Desde que nos encontramos en el vientre materno, existe una relación estrecha entre las actividades de nuestra madre y nuestro crecimiento.

Durante el embarazo, la alimentación de la madre se vuelve un factor determinante en la salud del bebé, el cómo transcurre su embarazo, se convierte en pieza clave para el carácter que formaremos más adelante.

Aunque en ocasiones resulte increíble, es importante seguir las recomendaciones pertinentes para ayudar al bebé que viene en camino.

Suplementar la Lactancia Materna con betaína (un nutriente que se encuentra en diferentes alimentos como los cereales integrales, las espinacas, el betabel o la quinoa y que además está presente de forma natural en la leche materna) podría disminuir el riesgo de Obesidad Infantil.

Lo anterior se reveló en un estudio en el que han participado investigadores del CIBER de Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), junto con el Instituto de Investigación Sant Joan de Déu y el Hospital Sant Joan de Déu en Barcelona.

Especialistas detallan que, los períodos gestacional y posnatal definen de manera importante la susceptibilidad a desarrollar enfermedades crónicas en edad adulta.

En particular, el periodo de Lactancia Materna es una ventana de oportunidad para intervenciones nutricionales con el objetivo de reducir el riesgo de Obesidad Infantil.

Una de las mayores amenazas para la salud de los niños es el Sobrepeso y la Obesidad, que afecta a los niños de entre 6 y 9 años.

El estudio

El documento publicado en la revista Science Translational Medicine, perteneciente al grupo Science, detalló que el equipo analizó muestras de leche materna de dos grupos poblacionales diferentes, uno de Estados Unidos y otro de la Comunidad Valenciana, comprobando que una menor concentración de betaína en la leche estaba asociada a un crecimiento más rápido durante los primeros meses de vida, lo que supone un factor de riesgo para el desarrollo de Obesidad infantil.

Para estudiar si la suplementación de la leche materna con betaína podía mejorar la salud metabólica de los niños, el equipo realizó una serie de experimentos en modelos animales.

En el desarrollo del estudio, se percataron de que esta suplementación con betaína también tenía efectos a largo plazo, como la mejora en el metabolismo de la glucosa durante la edad adulta.

El investigador del CIBEROBN, David Sánchez-Infantes, primer co-firmante del estudio, afirmó que existen factores que predisponen a desarrollar Obesidad temprana y pueden desembocar en problemas metabólicos a largo plazo, pero la suplementación con betaína durante la lactancia, podría reducir el riesgo de desarrollar Obesidad y enfermedades relacionadas cuando lleguen a la edad adulta.

El microbiota intestinal en la salud metabólica

Los investigadores observaron también cambios en el microbiota intestinal de las crías, concretamente un aumento de la bacteria Akkermansia.

La Akkermansia es una bacteria presente en los intestinos con efectos beneficiosos en el contexto de la Obesidad y los trastornos metabólicos, en aquellos animales que se habían alimentado de leche suplementada con betaína.

Los investigadores detallaron que, observaron que, si administraban Akkermansia directamente a las crías de ratón durante la lactancia, los efectos beneficiosos que se obtenían a largo plazo en la Obesidad y la salud eran similares a suplementar la dieta materna con betaína.

Son sin duda estudios que ayudan a la comunidad médica a reducir drásticamente, en un futuro cercano, la Obesidad infantil, la cual ha tenido un crecimiento interesante en los últimos años.

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